Una gran parte de la población entiende que a falta de patologías crónicas o puntuales no es necesario realizar análisis de sangre. Esto es un completo error ya que, aún estando sanos, se deben controlar periódicamente los niveles de determinados componentes de nuestro organismo.
¿Por qué debo hacerme un análisis de sangre?
Los análisis de sangre permiten al médico obtener información necesaria para determinar el diagnóstico de un paciente. Además, permite seguir la evolución en pacientes que ya están siendo tratados de alguna patología.
Por otra parte, es vital realizar análisis básicos de sangre y orina para prevenir la aparición de enfermedades y detectar precozmente factores de riesgo.
Una vez al año se debe realizar un análisis básico
Los especialistas establecen que se debe realizar un análisis de sangre básico una vez al año para determinar los niveles de colesterol, triglicéridos, urea, hemograma y glucosa.
Aquellos pacientes que sigan un tratamiento concreto para alguna enfermedad deberán realizarse un análisis antes de un año si el médico lo considera conveniente, con el objetivo de controlar la evolución de la patología y comprobar la efectividad del tratamiento.
Analíticas trimestrales durante el embarazo
Las mujeres que están embarazadas suelen realizarse una analítica cada trimestre. De esta forma, el médico logra descartar factores de riesgo en el desarrollo de anomalías o enfermedades que puedan afectar tanto en la madre como al bebé.
Si aún no te has realizado tu chequeo básico anual, no lo dejes pasar más tiempo y acude a los centros de LGS-Análisis. Tan sólo es necesario realizar una extracción de sangre y aportar una muestra de orina. Una forma sencilla y rápida de conocer cómo se encuentra tu salud.